miércoles, 5 de febrero de 2014

Reaccion a la Tesis de Miguel Angel Asturias

Reacción a la Tesis: Sociología Guatemalteca, El problema Social del Indio
Iván Quinteros
Licenciatura en Educación, USPG
Antropología en la Educación

Mi reacción inicial al leer la tesis es sentir una especie de agravio por el tono en que fue escrita la tesis, un tono que en nuestros días se siente ofensivo por el uso de términos que hoy en día son considerados tabú y hasta motivo de una demanda legal.  Pero después de leer más creo que el propósito del autor, exponer la situación tan calamitosa de la mayoría de indígenas de Guatemala, no debe ser opacada por nuestros prejuicios lingüísticos modernos. 
Después de superar las reacciones iniciales y tardías y mis prejuicios, puedo decir que estoy de acuerdo con la tesis principal de este trabajo tan controversial.  Esta tesis expone la razón por la cual la situación de Guatemala no ha cambiado por más de quinientos años desde la época de la colonización.  También estoy de acuerdo en que la raíz del problema es que el sistema en el que nos desenvolvemos es eminentemente discriminatorio e injusto, en ese entonces hacia el indígena y ahora hacia el pobre, indígena o no indígena.  Creo como el autor que la legislación, o la aplicación de la misma,  solo beneficia a los que ostentan el poder. 
Por otro lado, no estoy de acuerdo en que el haber sido conquistados por los españoles nos haya abierto la posibilidad a una sociedad civilizada como lo propone el autor.  Basta echar un vistazo a la situación actual de países conquistados por España y en donde no había indígenas guatemaltecos, para ver que pasan por problemas similares, o al menos pertenecen al llamado mundo civilizado.  Por eso creo que los españoles jugaron un papel preponderante en la situación en la que vivimos desde que vinieron a “civilizarnos”.  Otro argumento que el mismo autor expones es que antes de la conquista la sociedad de nativos de esta área era mucho más avanzada que como la dejaron. 
Me confieso totalmente ignorante acerca del estilo de vida de mis compatriotas en el interior de la República.  Es decir, he visitado ciudades, pueblos y hasta algunas aldeas pequeñas, pero por no más de algunas horas, lo que considero insuficiente para hacer una comparación con la descripción de la situación del indígena en su época.  A pesar de esta ignorancia experimental, creo que los indicadores de desarrollo, mortalidad, educación y otros no mienten y son testigo fiel de que la situación no ha cambiado desde ese entonces.  Situación sumamente preocupante pues ya han pasado casi cien años desde que se escribió esta tesis y todavía estamos en las mismas. 
A pesar de la coincidencia en los indicadores antes mencionados, creo que la descripción del indígena es una generalización que no creo representaba a todos los indígenas de ese tiempo ni a las de ahora.  Estoy seguro que ayer y hoy, ha habido indígenas que no Creo que tanto en el pasado como hoy, se han sabido de testimonios en que niños  indígenas no cumplen con el estereotipo, yo he conocido a un sin número de ellos, dicho sea de paso que no están culturizados o ladinizados.  También se han sabido de personas que han sido extraídos de su entorno desde pequeños  y son llevados y educados en otras partes del mundo.  El resultado es el opuesto de lo que se describe en la tesis.  Se podría concluir entonces que no es un problema  étnico, genético sino cultural y del entorno en donde la mayoría viven y del cual tienen pocas oportunidades de escapar. 

Por eso la solución está como el autor sugiere en cambiar el entorno y la cultura pues sino estamos condenados a más siglos de lo mismo.  El camino en el que vamos, en donde el estado se convierte o se le exige que se convierta en benefactor del desposeído me parece ser la ruta menos indicada, pues no ataca el problema de raíz.  Como sugiere el autor la educación es la base para el cambio, pero no la educación formal en las escuelas, únicamente.  Se debe educar a la familia entera, no solo en la educación formal pero desde los púlpitos, la prensa, y desde todo ámbito en el que se pueda influir en los que necesitan salir del círculo vicioso en el que se encuentran.    Entiendo que no se puede esperar cambios en donde el hambre y la desnutrición impiden el desarrollo cognitivo y fisiológico de nuestros compatriotas, pero por eso el esfuerzo debe ser público y privado para lograr tan titánica tarea, el desarrollo de nuestra amada Guatemala.